Cyara, rebeldía flotante.

Apodo: Cy-chan.
Nombre: Cyara.

Edad que aparenta: 17 años.
Raza: Fantasma.

Sexo: Mujer.
Tendencia sexual: Hetero.

Descripción Física: Posee una hermosa, lacio ondulada cabellera castaña miel que llega a rozarle los bordes de la cadera, con un largo fleco que llega a bordearle el rostro que aún perla con la juventud que en vida tuvo. Sus facciones son delicadas y sutiles con una nariz levemente respingona y abundantes pestañas que enmarcan unos grandes orbes aguamarina que evocan toda expresividad posible. Adornando sus cabellos es claramente visible un par de moños rojos que en raras ocasiones suele quitarse.

Sus mejillas son suaves y algo acolchaditas; algo que solía molestarle que le fuese acotado. Su piel es tersa y clara; tiende a ser un tanto pequeña de estatura, pero puede llegar al 1.68 con facilidad, pesando no más de 54 kilos. Cy posee un cuerpo bien dotado, así como balanceado, sin exageraciones en su contextura; cosa que quizá le da un toque de orgullosa.

Descripción Psicológica: Cy tiende a ser una chica bastante extrovertida y atenta, conocedora de varios tópicos y con cierto cariz que la denota levemente orgullosa de sí misma en veces; aunque no siempre. Tiene la costumbre de decir totalmente lo contrario de lo que quiere, algo que tiende a hacer difícil el hecho de complacerla con algo o incluso, saber exactamente el por qué de sus acciones con respecto a algo; algo tambien resaltante en su trato con aquellos que desean doblegarla, pues no da su brazo a torcer. Es bastante animosa para hacer alguna actividad, más aún si le han invitado; ya que se siente un tanto abatida por el hecho de ser un fantasma.

Cuando está enfadada, tiende a gritarle a la gente que se muera al tiempo que les señala con el dedo índice; y es capaz de volverse un tantito agresiva, hasta el punto de ser hilarante, con la pobre alma que provoca su ira. Su comportamiento se asemeja a un típica tsundere en casi todos los aspectos, no le gusta demostrar sus sentimientos abiertamente dado a que se avergüenza con facilidad provocando que se sonroje y trate de ocultar lo obvio con mentiras poco realistas. Puede llegar a mostrarse extremadamente celosa, y se exalta si alguien llega a sugerir que se preocupa por alguna persona.

En general, es una persona muy pacífica a excepción de cuando se la fastidia, pero tiende a cambiar según la situación; es una cajita llena de sorpresas.

Gustos:
- Dulces pasteleros.
- Las flores en todas sus presentaciones.
- El olor a pan recién hecho.
- El olor a libros nuevos.
- Una taza de té irlandés.
- Los gatitos (tiende a adorarlos en secreto).
- Hornear pasteles.
- La playa.

Odios:
- Los dulces fríos (dice que los dulces solo pueden ser calientitos).
- Los animales o peluches con poco pelo (detesta las cosas que no son mulliditas).
- El café y el olor de cigarrillo o tabaco (le causa repulsión y tos, en cuanto a lo segundo).
- El sonido de goteras (le pone la piel de gallina).
- Los lugares cerrados (simple fobia; suele atravesar paredes desesperada hasta llegar al aire libre).
- Que infieran que es cobarde, fea, mandona, entre otros aspectos negativos (pueden ganarse una mandada a la muerte y un dedo acusador de su parte).
- Que algo se le queme o no termine como ella pretendía.
- El rechazo y el llanto.

Historia: La razón de su muerte tiende a ser un factor de su persona del cual se niega rotundamente a contestar cualquier pregunta dada la cualidad completamente estúpida y vergonzosa que fue para ella. Resultó que cierto día de invierno en que cual se encontraba entumecida y echando chispas en contra de su novio de aquel tiempo por el frío, dado que odiaba un tanto esa característica. Él simplemente reía por la forma en cómo ella le reprochaba y le colocó un dulce en sus labios tomándola desprevenida; algo de lo que más tarde se arrepentiría.

El chico intentó hacer que Cyara se riera para que la noche fuese un tanto más amena mientras caminaban de la mano hacia el cine. Llegó un momento en que ella trató de huir de él para que no completara su hazaña, lo que hizo que ella comenzara a reír descontrolada, algo que le gustaba a él, pues su risa era armoniosa; hasta que todo quedó en silencio y él comenzó a preocuparse tras verla tendida en la nieve tratando de quitarse la bufanda sin poder hablar. Él trató de ayudarla a la vez que gritaba por auxilio, provocando que alguien llamase a emergencias.

De un momento al otro observó a su novio llorar mientras ella se incorporaba y bajaba de la camilla. Para verlo curiosa y acercarse a él para tratar de alegrarle dado a que ella había despertado, peor él pareció no escucharla; la dejó allí parada al tiempo en que él se alejaba con sus padres. Fue entonces cuando una mano se posó en su hombro susurrándole un "Lo siento mucho, pero él no puede verte Cyara"; cuando ella volvió a verle, pudo apreciar el rostro amable de un joven que no pasaba de los treinta. Era alto, castaño pelirrojo, con unos orbes de un azul oscuro que se asemejaba al índigo; "Acabas de morir ahogada por un caramelo. Mi nombre es Lukes Kierkegaard, soy un shinigami que ha-".

Claramente el pobre hombre no pudo terminar su presentación; Cyara se había avergonzado de tal manera por aquella patética muerte, que la ira, no solo por aquella vergüenza, sino por la rabia que le daba el morir en aquel precioso momento que ya no podría terminar. La joven de cabellos miel se abalanzó sobre el shinigami dando patadas y puños a diestra y siniestra atravesando al hombre de una forma inimaginable; cuando notó esta nueva vergüenza apretó fuertemente el puño anotando un gancho en el estómago del hombre, logrando golpearle.

"Y por recoger mi alma en ese momento... ¡Muérete diez mil veces!" exclamó por último la jovencita al tiempo que se alejaba con su orgullo en alto, aunque con el rostro rojo por la pena y bochorno. De allí en más, vagó durante varios años, hasta toparse con una tienda cuyo nombre rezaba en todo lo alto como "Ai Doobutsu"; no fue muy dada a la idea, pero era mejor eso que andar por la calle sin tener realmente qué hacer.

Objetos personales: Chocolate; siempre lleva una barra en su bolsillo cuando se materializa. Una pequeña libretita donde guarda fotos de su pasado y algunas notas interesantes desde que se volvió fantasma.

Imágenes:

Anime/Manga/Videojuego del que procede: Mayoi Neko Overrun!
Nombre real: Fumine Serizawa.